A caballo entre lo industrial y lo vintage

Así es el look de este increíble apartamento de Rotterdam que, tras una muy lograda reforma, ha conseguido mezclar inmejorablemente dos estilos diferentes pero que juntos trabajan así de bien: el industrial y el vintage.

De lo industrial tenemos básicamente los elementos más estructurales del espacio. Esto es, la altura de techos, los amplios ventanales, las paredes de ladrillo visto, el suelo de cemento pulido, las maderas sin apenas tratar, el acero de los electrodomésticos… Y, en cambio, el toque más vintage se centra en las piezas y el mobiliario: las sillas, las luminarias, el sofá, los objetos decorativos como el mapa mundi, las flores o los textiles y los colores…

Un estilo y otro, como podéis ver, se complementan a las mil maravillas y se suavizan uno a otro a la perfección. Son una pareja estupenda y creo (y mira que me cuesta decir esto) que de esta combinación nace el estilo decorativo que más gusta de todos.

Y a vosotros… ¿qué os parece este estilo? ¿Os gusta el industrial-vintage o vintage-industrial?