Este color, el rosa en todas sus variantes y graduaciones, es luminoso, fresco, juvenil y, sobre todo, muy muy romántico. Transmite relax emocional y emociones suaves, amables y profundas…
El rosa es un color, sobre todo, bondadoso que, desde antaño, se asocia a lo femenino y delicado. En nuestra cultura se le relaciona también con la sensibilidad y el amor verdadero y altruista y sus tonos van desde los luminosos pastel y rosa yeso (casi neutro), hasta el granada y el coral, pasando por el rosa pardo o el frambuesa…
En decoración, los esquemas en rosa proporcionan vitalidad y femineidad. Es una gama que puede funcionar muy bien en dormitorios y que es, sin embargo, algo más arriesgada en salones. Además, para que no resulte demasiado insípido requiere de la presencia de otros colores y tonos que endurezcan su matiz. El verde es su complemento perfecto y salpicándolo con toques de azul o amarillo la combinación que conseguiremos también será agradable y acertada…
Quizá (aunque esto también es cuestión de gustos) los mejores matices de rosa para una casa son los de aspecto desgastado y apagado, como el rosa yeso y el rosa seca. Es una tonalidad, por cierto, que encaja a la perfección en el estilo shabby chic. De hecho, como ya hemos comentado alguna vez (ver post), es una de las tonalidades básicas que lo caracterizan.
8 junio, 2013
banana
El rosa es el color preferido de mamá. Es curioso pero la descripción que has hecho del color «relax emocional y emociones suaves, amables y profundas…» y «sobre todo, bondadoso», «se asocia a lo femenino y delicado. En nuestra cultura se le relaciona también con la sensibilidad y el amor verdadero y altruista»
¡ESA ES MI MADRE! ¡QUÉ CURIOSO QUE LE GUSTE EL ROSA!
8 junio, 2013
Bea Atienza
Jajajaja… No creo que sea entonces una casualidad! ;P