
Hacía tiempo que el interior de una vivienda, en este caso de un apartamento, no me transmitía esta sensación: una sensación de absoluta calma y paz. De ahí, el titular de hoy. Es la primera palabra que me ha venido a la cabeza al ver la decoración y el estilo de esta vivienda. Un look sencillo y elegante a más no poder que se basa en el uso de un color y un material: el blanco y la madera de pino. Una combinación perfecta que, en este caso, han sabido aplicar con maestría los diseñadores e interioristas del estudio alemán Oink. Disfrutad paseando por cada uno de sus rincones, pero… ¡cuidado!… que a mi, cuando lo he visto, ¡se me han parado hasta las agujas del reloj! Si os pasa, no olvidéis volver a ponerlo en marcha después… ;P
Y cada detalle…
El portal, también merece mucho la pena…
Pura armonía, ¿verdad? Pues otro día os traigo alguno más de sus proyectos de interiores. ¡Son todos estupendos!
16 agosto, 2013
Decoratualma
Que preciosidad de apartamento, perfecto lo mires por donde lo mires!
16 agosto, 2013
Bea Atienza
Verdad? ;P
17 agosto, 2013
Sunaho
tienes razón pura armonía; no obstante eso es lo que tiene la madera de pino, ese sabor cálido y en armonía con la naturaleza y el entorno que añadido al color blanco transmite «esa paz» de la que hablas, ese estado «sublime» en el que no existe el tiempo.
17 agosto, 2013
Bea Atienza
No podía haberlo definido mejor! Así es! Un abrazo.