Rincones exteriores mini… ¡que a mi me valen!

Esta si es una de las cosas que más envidio (de forma sana, siempre) cada vez que  las veo. Me refiero a las viviendas que tienen una zona exterior. Me da igual que sean patios, terrazas, porches, balcones… ¡El caso es que estén al aire libre y que te permitan disfrutar de la vida outdoor, sobre todo en primavera y verano! Posiblemente sea porque vivo en la ciudad, pero la cuestión es que daría lo que fuera por poder tener una. Y en este caso, sinceramente, el tamaño poco importa. Disponer de un pequeño rinconcillo para poder despejarte, leer, desayunar o tomar el sol en la cara… ¡es más que suficiente! Y quien diga que con tan pocos metros, el espacio no se puede poner mono… ¡miente! Para muestra, un botón.

La clave para espacios reducidos es elegir las piezas básicas, las que nos resulten fundamentales, introducir toques de color (siempre lo recomiendo en zonas exteriores) y añadir plantas y/o flores. Si, además, alguno o varios de esos muebles y complementos tienen más de una función, ¡mucho mejor!

Si te gusta el look… ¡consíguelo!

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Y vosotros, ¿tenéis la suerte de contar en casa con una zona exterior?… Si os parece, podéis darme envidia y contarme cómo la tenéis decorada.

P.D. He aquí otra de esas terrazas (esta más grande) que me quitaron el hipo hace tiempo.